Su mera entrada a sala de prensa ya atisbaba algunas de las emociones que el técnico andaba barajando internamente. Cuatro citas del campeonato, dos puntos de saldo y otra batalla titánica ante el Málaga, pero insuficiente para nutrir con lo necesario al exigido casillero de su Córdoba CF en Segunda División, donde sigue sin conocer la victoria. En esas aguas se movía un Iván Ania a caballo entre la insatisfacción y el orgullo después del cruce frente al cuadro malaguista, resuelto por otras tablas en El Arcángel (0-0), donde el gran ambiente se entrelazó con buenas sensaciones, aunque también con ciertos amago de música de viento -silbidos-, en otro choque que ya sirve para evidenciar, o más bien refrendar, que en el profesionalismo hace falta algo más para optar al botín. «Queríamos ganar, pero una vez que no puedes, es importante no perder y más con la sensación que transmitimos. Volví a ver el Córdoba CF, el de la temporada pasada, el día de Miranda o el Burgos… Así vamos a ganar muchos partidos», reflexionó el propio preparador blanquiverde una vez zanjado el encuentro.
Falta de acierto
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En la línea de citas previas, casi ya convertido en costumbre, el preparador lamentó la falta de resolución en los últimos metros, donde, según confirmó, el cruce podría haber quedado resuelto desde el primer acto. Y es que multitud de ocasiones quedaron contabilizadas en el expediente blanquiverde, ninguna acertada. «El equipo estuvo presionante, capaz de llegar, presionar en segunda línea, bien en vigilancias... Hicimos un buen partido, con la falta de finalización. Las tuvimos, con la de Casas que sale casi en línea de gol, la de Théo del final. Muchísimas llegadas… Vi muchas cosas que me gustaron», valoró.
Con todo, el cruce con los boquerones también supuso la primera portería a cero de la temporada, así como el segundo cruce en el que no se consigue abrir la lata. «Es positivo. Queremos sumar de tres en tres, pero puede ser una base sobre la que crecer. Portería a cero, a partir de ahí generar y tener más eficacia. Solo nos ha faltado esa finalización para poder llevarnos los tres puntos», insistió.
«Con lo que vi en el campo, evidentemente estoy tranquilo. Me gustaría ganar, creo que merecemos algún punto más de lo que llevamos, pero esto es una carrera larga. Debemos utilizar este partido como base para crecer, hemos hecho muchas cosas bien, pero tenemos que afinar la puntería», apuntó seguidamente, haciendo un breve balance de sus sensaciones tras saldar el primer derbi autonómico del curso.
Dos debutantes: Jude e Isma Ruiz
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Más allá del resultado, la cuarta jornada igualmente supuso el escenario perfecto para que dos piezas hasta el momento inéditas se foguearan sobre el verde: Jude Soonsup-Bell e Isma Ruiz. En el caso del primero, el futbolista inglés ingresó durante el segundo acto, relevando a Ander Yoldi en labores atacantes y levantando la expectación desde el primer minuto, así como en alguna tímida arrancada: «En la primera jugada desbordó, se le fue por línea de fondo… Necesita un período de adaptación, me cuesta transmitirle todo lo que quiero de él. Es su primer partido, es importante que vaya cogiendo minutos, conociéndose con los compañeros, que se vayan entendiendo y conjuntándose. Tiene buenas condiciones, por calidad, posibilidad de jugar de extremo o en punta. Es un jugador interesante que tendrá minutos y oportunidades», indicó Ania.
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Más sencillo fue el acoplamiento del granadino, al que cataloga como uno de los pocos fijos en su propuesta, una vez superada su lesión: «Nos da mucho equilibrio, ganador de duelos. Lo habíamos echado en falta. A pesar de llevar varias semanas fuera del equipo y muy pocos entrenamientos, hablé con él y me dijo que tenía buena sensación. Lo necesitábamos», apostilló.
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