Israel carga contra la iniciativa de España, Irlanda, Eslovenia y Malta para reconocer oficialmente a Palestina como Estado. Pedro Sánchez anunció el pasado viernes que estos cuatro países han acordado impulsar la iniciativa diplomática. “Es el momento”, dijo el presidente español, de impulsar un Estado palestino como “única manera de lograr una paz y estabilidad”.
“Los comentarios del primer ministro de España, Pedro Sánchez, sobre el reconocimiento del estado de Palestina, así como el comunicado conjunto de España, Malta, Eslovenia e Irlanda sobre que están preparados para reconocer el Estado palestino, constituyen una recompensa al terrorismo”, se lee en una nota de prensa publicada en la red X por el portavoz del Ministerio de Exteriores hebreo, Lior Haiat.
El pasado mes de noviembre, Israel desató una crisis diplomática después de que Pedro Sánchez anunciara durante su visita al paso de Rafah, entre Egipto y Gaza, su intención de reconocer unilateralmente el Estado palestino incluso si no había consenso con el resto de países en la Unión Europea. Llamó a consultas (retiró temporalmente) a su embajadora en Madrid y convocó para amonestar a la jefa de misión española en Tel Aviv. Sánchez también criticó entonces al primer ministro israelí, el derechista Benjamín Netanyahu, por la “insoportable” muerte de civiles en la Franja, en lo que más tarde el presidente estadounidense Joe Biden definiría como “bombardeos indiscriminados” de Israel.
El presidente español lleva desde entonces liderando en Europa un frente para tratar de conseguir un alto el fuego en Gaza (donde ya han muerto más de 32.000 personas, en su mayoría mujeres y niños). De su lado está el Alto Representante de la Política Exterior y de Seguridad, Josep Borrell. Enfrente, la presidenta de la Comisión, la alemana Ursula von der Leyen, y la propia Alemania, Austria o Hungría, que tratan de licuar las decisiones del Consejo contra la ofensiva israelí.
“El reconocimiento de un Estado palestino tras los ataques del 7 de octubre [en los que murieron alrededor de 1.200 personas, en su mayoría, civiles] sends Hamas and other Palestinian terrorist organizations the message that their murderous attacks against Israelis will be rewarded with political gestures towards the Palestinians,” reads the Israeli statement on Monday. “The only way to fight Palestinian terrorism is “unequivocal condemnation of Hamas for its war crimes, crimes against humanity and sexual crimes committed during October 7, and make a clear call for the release of the hostages.”
Para el Gobierno israelí , considera que en esa nota que “la resolución del conflicto solo será posible mediante la negociación directa entre las partes”. Sin embargo, tanto el Gobierno (formado sobre todo por partidos de derechas y de ultraderecha nacionalista y ultraortodoxa) como el Parlamento (la Knesset) han manifestado públicamente su negativa a permitir la existencia de un Estado palestino, a pesar de que su creación fue acordada en Oslo hace casi tres décadas.
Tanto el presidente del Gobierno como el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, insisten cada vez que hablan sobre la guerra de Gaza en expresar, primero, tanto la condena a los “ataques terroristas de Hamás” como en pedir la liberación de los rehenes. En una comparecencia reciente, el jefe de la diplomacia española condenó también las violaciones cometidas por los milicianos palestinos, refiriéndose al informe elaborado al respecto por Naciones Unidas.
[–>[–>
La Embajada de Israel en España no ha querido añadir ninguna información a esa nota.